La trabajadora Isabelle Cook tiene un grave problema.
Su granja familiar, sede de la Aldea de Navidad de Tilikum, tiene problemas. Grandes problemas. ¿Y lo peor de todo? El hombre que intenta comprarla no es otro que el hombre más gruñón y malhumorado de todos: Elias Stoneheart.
ESO ES UN GRAN NOP.
Ella no va a dejar que se involucre.
No con su corazón hecho de carbón.
Elias Stoneheart está en el negocio de hacer dinero, no amigos. Especialmente cuando su jefe le promete un ascenso muy esperado. Todo lo que tiene que hacer es convencer a una familia en apuros de que venda su granja.
¿EL PROBLEMA?
Es la granja de la familia Cook.
E Isabelle Cook es su ex.
Puede que tenga una historia con Isabelle, pero esto es sólo un negocio. Una granjera amante de la Navidad no se va a interponer entre él y su ambición.
¿Y LA NAVIDAD?
La odia.
La Aldea de Navidad tiene que irse.
Pero a medida que Elias pasa tiempo en el pequeño pueblo, el espíritu navideño -e Isabelle- se le mete en la piel. Y puede que ella sea la única que pueda derretir el hielo que rodea su corazón.
