Pero aunque la ciudad de Edimburgo es absolutamente mágica durante la temporada navideña y este dúo tiene suficiente vapor entre ellos para hacer que la nieve se derrita, la Navidad a menudo trae su propia cuota de problemas.
Kayla echa de menos a su madre y a San Francisco mientras intenta adaptarse a la vida en Escocia, Lachlan se esfuerza por controlar sus siempre presentes demonios (que tienen más fuerza durante las fiestas) y su hermano mayor Brigs se enfrenta a sus propios recuerdos difíciles.
Sin embargo, una cosa es segura: esta será una Navidad que nunca olvidarán.
Mil gracias a LDC!