A dónde te envían cuando el mundo piensa que estás muerto. Y créeme, desearás estarlo.
Somos la mancha en la sociedad. Los monstruos, los escalofríos, tus documentales favoritos de Netflix cobran vida.
Nos encierran y tiran la llave, porque nos lo merecemos.
Pero no yo. Solo soy un humilde ladrón de bancos. No pertenezco aquí, rodeado de psicópatas y asesinos sin remordimientos... Al menos, no creo que lo haga.
Salir ileso es mi máxima prioridad. Desafortunadamente para mí y para mis compañeros de prisión, los responsables son más peligrosos que nosotros.
Verás, los guardias dirigen el espectáculo, y parece que he llamado la atención del más retorcido.
Tiene un nombre, pero bien podría ser Oficial. Nos movemos uno alrededor del otro como un sol y una luna, girando en un eje de confusa lujuria y tormento hasta que la verdad se distorsiona, y lo que una vez temí se convierte en lo que anhelo; mi vil adicción, de alguna manera tan exquisita.
La realidad se deforma en la mazmorra y me quedo preguntándome qué prisión es peor... la que sostiene mi cuerpo o mi mente.
Mil gracias a MB & FB!