Thorne también es único. Fruto de un experimento genético, no es inmortal, pero tampoco mortal. Está buscando un lugar para esconderse, para tener un poco de paz y tranquilidad para poder resolver las cosas, y el santuario de Stephanie es perfecto. De hecho, Stephanie es perfecta. Por primera vez, Thorne es libre de ser él mismo y se está enamorando de ella.
Pero si van a tener un futuro juntos, primero tendrán que lidiar con su pasado... porque el científico loco que creó a Thorne ahora está detrás de Stephanie.
Mil gracias a GLO!