Pero cuando un altísimo directivo de una multinacional, arrogante y rico, se registra en el hotel, todo su mundo se vuelve patas arriba; aunque el señor Grayson se comporta como un auténtico idiota, no puede controlar su atracción hacia él. Es arrogante y exasperante, pero una mirada suya hace que el cuerpo de Emma se encienda.
Gavin Grayson vive para el trabajo y no tiene mucha vida personal, pero cuando entra en el hotel queda cautivado por la preciosa supervisora que le atiende. Odia lo mucho que la desea. Se siente fuera de control, enojado, y parece descargar su hostilidad con ella...
¿Explotará finalmente la tensión sexual que hay entre Emma y Gavin sin que afecte a sus vidas tal y como las tienen planeadas? ¿O los obstáculos serán demasiado grandes para que terminen juntos?