Adalasia entra en la mente de Sandu sin problemas, como si hubiera sido parte de él desde siempre. Si bien puede ver la forma de las cosas que vendrán en su mazo de cartas, su regalo es tanto una bendición como una maldición. El verdadero curso de la búsqueda de Sandu sigue sin estar claro, con el peligro esperando a cada paso. No puede ver todo lo que le depara el futuro, pero sabe que es un viaje que emprenderán juntos.
Mil gracias a Lina por el aporte!